EL ESCRITOR APUÑALADO
por Pablo Huneeus

En su último noticiario, de 39 minutos atrás, BBC News anuncia desde Londres, que el “festivo y desafiante sentido del humor” del novelista Salman Rushdie (75), “se mantiene intacto”. Son palabras de su hijo Kazán, que vienen acompañadas de una foto de archivo, quizás de cuando, donde nos muestran a Rushdie de anteojos, con incipientes cataratas, ante un risueño público anglo que parece divertirse con sus salidas.

Notable, que un septuagenario, tras ser embestido el viernes por un avezado cuchillero de veinticuatro años que le propinó diez o más estocadas profundas, el domingo se encuentre bien.

Milagroso, que habiendo sido llevado en helicóptero al Hospital de Pennsylvania, donde su corazón es mantenido latiendo con ventilador mecánico, y un escueto comunicado habla de un ojo, cuello, brazo, e hígado severamente comprometidos, al tercer día, siguiendo los pasos del Nazareno, resucite entre los muertos.

Y para la serenidad del espíritu, convéncete Pablo de que está todo bajo control. Se le brindó a Rushdie plena seguridad, muy competentes sus guardias. Igual, muy profesionales los funcionaros de la ONG pro defensa del escritor perseguido que organizaron, en el condado de Chautauqua, Estado de Nueva York, una charla de quien desde 1988 es perseguido a muerte por inquisidores de nuevo cuño.

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Artículo en desarrollo, suspendido a las 21:40 del domingo 14 de agosto por inminente corte de electricidad, a causa del temporal que vino de mar adentro.